10.12.2006

Viernes Trece


¿Cuánto dolor es necesario para purificar tu alma? ¿Cuánto suplicio resulta adecuado para finiquitar tus deudas pendientes? ¿Cuántas ordenes bastarán para voltear la página? ¿Cuántos caminos deberás tomar para encontrar un hálito de paz? ¿Cuántas respuestas guardas bajo tu asoleada almohada? Y dime ¿Son muchos los recuerdos que se elevan por los cielos y despiertan tu memoria? ¿Conservas los infinitos sellos de agua de aquella historia? ¿Qué fue de tu manía analítica al espectar realidad y ficción? ¿Mantienes tus obtusas ideas sobre la deliciosa filosofía swinger? ¿Permanece incólume tu perfecto hartazgo hacia la critica? ¿Queda el ínfimo asomo de locura omnipresente? ¿Y erradicaste la dulce ira de tus días? ¿Aún cuentas con la lucidez de tus decisiones? ¿Guardas tu ferviente devoción workholic? ¿Todavía vistes de verde y azul?
Me parece que podría escribir una historia con tus más de mil días. Esta búsqueda. La que todos perseguimos. Se basa en el ambiguo espectro del querer. De la complaciente fascinación de dos. De fantásticas suposiciones. Aseveraciones o descartes. Ambivalencia de extremos. De noches tardías y esperanzas diurnas. La resplandeciente luz que enciende y apaga. Mimosísimo. Y vaya el superlativo. Subrayado en cada afecto. En cada engaño. En cada escape. ¿Otra vez? No por Dios. Cánsate. Con la perorata de preguntas. Ninguna respuesta será lo suficientemente buena para acallar tu tormenta de dudas e intrigas. Que no te abandonarán. Estoy segura. Que no te fallarán. Para coronar el viernes trece. Un poquitito de sosiego. ¿Y por que no?.

5 comentarios:

Mar dijo...

no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista mi amiga del alma. El amor nos juega terriblisimas pasadas; si pudiera haría campaña para no creer en el. Para no creer también en el lobo que viste piel de cordero, que te destroza de a pocos y sin darse cuenta, que coge tu corazón, se lo come y luego te pide perdón por hacerlo. Mi historia de cuentos compartidos llegó a su fin. Las historias de muchos seguramente también lo hacen, pero eso no nos hace menos, al contrario nos debe hacer fuertes y saber que valemos como mierda. Seremos felices ya lo verás. (aunque en esta hora de pesimismo pueda sonar tan dulce una mentira).

Te quiero mucho Mirella.Gracias por ser mi hermanita de la luna.

Unknown dijo...

Yo te adoro mi Reina! Y sabemos que SI! Queremos que vengan los lobos a ver si pueden con nosotras! Dale mi niña ya no recuerdas el reve de mano para sacarle la vuelta a la transitoria desventura uhmm? Que vengan GUARRA! que somos de lo peor.. A ver quién se atreve! Mi hermanita de la luna!

Rolando Escaró dijo...

y otro viernes 13, como si no fuera suficiente tener que soportar suficientes maldiciones al despertar, ahora hay que maldecir por culpa de las supersticiones. al diablo el viernes 13 y las preguntas de cada día...

es que a veces ya no hay respuestas querida niña

Anónimo dijo...

Eso te pregunto yo, y porque no dejas de torturarte/ Otra vez tengo que rescartarte ya ves y justo ahora que no tengo como regresar, te quiero pero lo hago más cuando escribes otras cosas y no esas boberas y para que no te friquees siii! escribes bonito bonito bonito con tu ribbon pink!

Anónimo dijo...

Se sufre en el amor, o mejor dicho el desamor, en todos lados.El tiempo te ayuda a saber soportar el dolor, creo yo, que no lo cura, te puede ayudar a entender mejor todo el conjunto, con lo bueno y lo malo. Que hacer? no morir en el intento, y buscar el siguiente paso.
Saludos
Andrés (Hachabrava)
Argentina