12.20.2008

LA HORA DE LA GALLETITA

No estamos en la hora del cafecito. Ni del matecito. Mucho menos en la del lonchecito. Con ustedes queridos radioescuchas: ¡LA HORA DE LA GALLETITA! Si les resulta algo ñoña la idea. Pueden mover el dial y perderse una variopinta conversa. Tiempos en los que proponíamos. Y nuestra pequeña comunidad disponía. Habla, escuchas?




Más o menos ése era el ánimo de mi primer magazine de radio. Ése su nombre. Y Cynthia la culpable de la feliz idea. Hace tiempo ya. Cuando me sentaba al frente de esa enorme mesa de madera barnizada. Y cual objetos del deseo se mostraban los microfonos. Ansiosos para sentir el off. Escuchaba mi voz de gato acoplarse e inmediatamente decía nunca más. Pero después todo cambiaba. Queria vivir ahi. Fascinada con ese auditorio. Cifrado en los cuatro gatos integrantes de mi grupo. Y uno que otro fizgón. Hasta que mi adorado Chiqui me decia: ¡Flaca, ya pues ya termino la nota!

La media hora que duraba el programa transcurrian como mil. Nadie se salvaba de caer en las garras de la deseperación. Si uno gritaba. El otro musitaba un %$##""!!! Mientras otros contemplaban angustiados a las conductoras. Los productores cruzaban los dedos para que llegaran los invitados. Las caras de bien mal ¿qué es eso? terrible y un aburrídisimo de la profesora. Eran una real tortura. Pero cada minuto - sin temor a equivocarme - fueron imperfectamente perfectos. Los disfrute tanto que hasta hoy me asaltan. Y me llevan a esa sala sacada de cine B de aquel médico naturista en Breña que me habló de un aparato que limpiaba el aura.


¿Por qué del arribo de esas escenas? ¿Ahora? Después de casi diez años. Sencillamente: Estuve al otro lado del río. Presencié a personajes que me recordaron lo que fui. Lo que fuimos. Un grupo de chicos con muchas ganas. Expectativas. Energías. Nervios. Con errores. Aciertos. Y sobretodo: unas ganas locas de comerse al mundo con cada intervención al aire. Y es que estuve de invitada en el programa radial de mis alumnos. Me conmovió cada intento de realizar "el programa". Me paralizó tanto manejo de situación. Ahora ellos dirijian todo. Más! Me halago el hecho de que hubieran leído este espacio medio mio. De mis otros yo. Y también de ustedes.

Haciendo un balance de este año. Profesionalmente he realizado actividades que siempre quise: Interactuar Conversar Compartir. Lo cual lo veo reflejado en mis clases. Crear espacios líneas formas. Coordinar colores ubicar gráficos. Administrar el potencial de los espacios para priorizar la información presentada. Osea diagramar una revista. Y no lo olvido. Desplazarme en ámbitos cultutrales superfluos y lascivos. ¡Euch! Escribir en PRIVÉE.


Ahora con el 2009 a la vuelta. Se me ocurre volver a juntar. Ánimos locura desenfado gritos histeria brainstorms amistad para cuestionarnos un ¿Qué si? Una vez lo hicimos y salió lindo, ¿no? Dicen que el primer paso para concretar los planes es trazarlos. Hecho. Lo demás el facebook hi5 y algo de tiempo para recordar viejos tiempos y encadilarnos una vez más nos revelará un Si o No. Por lo menos la luz de AL AIRE se encendió nuevamente.

¡Gracias Chicos! Por recordarme que esta carrera - la nuestra - es lo más rico del mundo entero. ¡Gracias mami! porque sin tí no habría nada de mi.

2 comentarios:

juan rafael dijo...

Buen curriculum y buenas expectativas.
Te apoyo incondicionalmente en que tus deseos se cumplan.
Besos y féliz año.

Rolando Escaró dijo...

la "hora de la galletita" es lo más ñoño que pude escuchar en mi vida...

y eso que soporté trabajar con la ñoña y sus ñoñadas