12.20.2008

CASADO CAZADOR

¿Qué motiva a un hombre casado buscar afuera lo que tiene en casa? ¿Acaso no sabe que existen niñas dominatrices?




¿Casado o cazado? Casa: sinónimo de hogar. Dos: alusión de pareja. Por ende hogar de a dos: Familia. La célula de la sociedad. Las hay funcionales y disfuncionales. Caza: persecusión de un ser vivo hasta capturarlo. Do en inglés denota acción inmediata. ¡Hazlo! ¡Ahora!

Eres casado. Con esposa. Esposa: instrumento para someter a un individuo que cometió un delito. Con hijos. Lo más grande. El eslabón de continuidad del ser humano. La prevalencia de la estirpe en cuestión. Con responsabilidades: serie de deberes que garantizan el bienestar de un grupo.

La pregunta es: ¿Qué motiva a un hombre casado buscar afuera lo que tiene en casa? ¿Acaso no sabe que existen niñas dominatrices? De rostro tan angelical que desquicia. Al borde del desvarío. Que en una clara revelación y coalición con las de su género pueden encender un viernes cualquiera. Con llamas no de pasión. Sino con lenguas de fuego que devoren su bigámica personalidad.

Esposarlos. No con vínculos de fidelidad y devoción. Y decimos no. Ese retrato de felicidad fotográfica. Aquí no tiene lugar. Atarlos con cadenas de torturas y regocijo del dolor. Encerrarlos en un closet de hotel de 3 estrellas. Marcar el teléfono de su bien amada. Y delatarlos. Echando por tierra todas sus risibles fantasías. Aún eso nunca. Ni nada. Será suficiente.


Hasta que llegó a casa. Giró la llave. Silencio irregular. La voz de los niños estaba escondida. A cambio. Pequeñas alegorías de satisfacción. Siguió la ruta. El camino que otras veces había recorrido entre alcohol y perfume de mujer ajena. La alfombra gris reveló ropa tirada. Panties. El wonderbra que pagó con su dinero. Se disponía a abrir la puerta. De su habitación.

La que dormía a su lado. Buscó también ser cazada. Y lo logró. Ambiciosa ella burló toda suposición. Se zurró sobre cada noche de amoríos foráneos del hombre que cazó. Podía haberle revelado cada infidelidad. Cada insatisfacción. Cada beso de mentira. Y los muchos deslices compartidos en días distintos. En una misma cama.

Sin remedio. Buscó a la niña de tacones altos. De cabello corto. Con enormes ojos miel. De alma impoluta como la nata de la leche. De muchos. Por horas de él. Lástima. No habia más turno. Absorto frente al mar. Montado en una espléndido automovil yacía el casado cazador. Más solo que la luna del último mes del año. Porque hasta al más furtivo se le escapa - sencillamente - todo.

Dicten ustedes mismos la moraleja.

6 comentarios:

Gabriel Bornes dijo...

Jajajajajajajaja lo que hace la gula. En todo sus sentidos.

Casado/a.

Que motiva a cualquiera a comer fuera de casa.

A veces porque no lo tiene. Y otrasque lo tienen no le interesa, o porque siempre el jardín de al lado se ve mejor.

Claro, hasta que te la hacen y ya no parece tan divertido.

Saludos.

Unknown dijo...

Fer de mi vida!

Usted el hombre más fiel a sus principios y convicciones deja entrever que SI le gusta el postre del jardin de al lado jaaa!! bueno todo sea según la óptica con cual se vea.. algunas mujeres buscan inconsientemente que e hombre "busque" lo que deberia tener a raudales en casa.. PERO los hombres no se salvan tampoco... Y valgan verdades NOSOTRAS nacemos con más tolerancia al dolor .. AUCH!!!

Besos mi niño, po!

Gabriel Bornes dijo...

Jajajajajaja mire doña, que este a dieta no quiere decir que no pueda ver el menú de vez en cuando XDDD

Jus. dijo...

Chevere ----

¿ Qué le regalarías al Presidente por navidad?

http://libertadperiodistica.blogspot.com/2008/12/encuesta-navidea-qu-le-regalara-al.html

Rolando Escaró dijo...

yo diria que la moraleja es que la vida no tiene moralejas,sólo tiene consecuencias

de eso, estoy seguro que saben mucho quienes han estado en ambos extremos de la infidelidad. no lo crees?

eme dijo...

Vaya, ¿será que la mentira lleva a otra mentira irremediablemente? Feliz navidad, guapa :)